“Somos una escuela de Kung Fu tradicional”. Con esta palabras define Bernardo Tirado la escuela de Kung Fu Yat Chi Kuen, su escuela. Junto a Javier del Valle, fueron los maestros que instauraron este arte marcial milenario en Tomares, a finales de 2010. Lo hicieron “porque es un municipio que apuesta por el deporte y las escuelas deportivas”, según apunta del Valle.
Su especialidad es el Win Chun, la modalidad de Kung Fu más practicada y una de las 5 que provienen del Shaolín. Además, practican el Sanda, el Boxeo y las Artes Marciales Mixtas, disciplinas que se imparten en la escuela.
Desde sus comienzos, la escuela ha cosechado muy buenos resultados. Buena prueba de ello son las cinco medallas conseguidas, dos de ellas de oro, en el Campeonato de España de Kung Fu, celebrado en la localidad madrileña de San Martín de Valdeiglesias. Allí, Jebbor, en Formas Tradicionales hasta 14 años, y Paula Calero, en Combate Estándar hasta 65 kilos, quedaron campeones. Francisco Díaz, por su parte, quedó segundo en Sanda en más de 90 kilos, Luna Domínguez acabó segunda en Infantil A en Formas con Sable y Alí Jebbor consiguió también un bronce en Formas con Sable. Ninguno había competido antes.
Se trata, sin duda, de un gran balance para una escuela que cuenta con 60 alumnos, y que espera aumentar el número ya que “el Kung Fu es una filosofía aplicable a todos los ámbitos de la vida”, declara Javier del Valle. El sacrificio, el honor, el respeto por el compañero y el contrincante y la capacidad de sacrificio son algunos de los valores fundamentales para la práctica de esta disciplina, para la que aseguran que "no hay edad".
Según Bernardo Tirado, “muchos encuentran en el Kung Fu un camino para toda su vida”, y frente a los que piensan que es algo violento, Javier lo tiene claro: “A nuestros alumnos les enseñamos que el cerebro es el músculo más fuerte”.
Amigos desde hace más de 20 años, poseen títulos de campeón a nivel nacional e internacional, son árbitros nacionales, y sus certificaciones están reconocidas por el Consejo Superior de Deportes. A pesar de ello, se siguen superando y ambos quieren ir este año a por el quinto dan “porque el Kung Fu es un camino de superación”.
Su especialidad es el Win Chun, la modalidad de Kung Fu más practicada y una de las 5 que provienen del Shaolín. Además, practican el Sanda, el Boxeo y las Artes Marciales Mixtas, disciplinas que se imparten en la escuela.
Desde sus comienzos, la escuela ha cosechado muy buenos resultados. Buena prueba de ello son las cinco medallas conseguidas, dos de ellas de oro, en el Campeonato de España de Kung Fu, celebrado en la localidad madrileña de San Martín de Valdeiglesias. Allí, Jebbor, en Formas Tradicionales hasta 14 años, y Paula Calero, en Combate Estándar hasta 65 kilos, quedaron campeones. Francisco Díaz, por su parte, quedó segundo en Sanda en más de 90 kilos, Luna Domínguez acabó segunda en Infantil A en Formas con Sable y Alí Jebbor consiguió también un bronce en Formas con Sable. Ninguno había competido antes.
Se trata, sin duda, de un gran balance para una escuela que cuenta con 60 alumnos, y que espera aumentar el número ya que “el Kung Fu es una filosofía aplicable a todos los ámbitos de la vida”, declara Javier del Valle. El sacrificio, el honor, el respeto por el compañero y el contrincante y la capacidad de sacrificio son algunos de los valores fundamentales para la práctica de esta disciplina, para la que aseguran que "no hay edad".
Según Bernardo Tirado, “muchos encuentran en el Kung Fu un camino para toda su vida”, y frente a los que piensan que es algo violento, Javier lo tiene claro: “A nuestros alumnos les enseñamos que el cerebro es el músculo más fuerte”.
Amigos desde hace más de 20 años, poseen títulos de campeón a nivel nacional e internacional, son árbitros nacionales, y sus certificaciones están reconocidas por el Consejo Superior de Deportes. A pesar de ello, se siguen superando y ambos quieren ir este año a por el quinto dan “porque el Kung Fu es un camino de superación”.
TOMARES DIGITAL / REDACCIÓN
