Aunque no guarda parentesco alguno con el famoso navegante portugués más que en el nombre, el joven tomareño Fernando Magallanes, ha conseguido toda una hazaña épica al obtener la nota más alta de Sevilla en Selectividad: 9,950. Esta puntuación sumada a la de su trayectoria académica, en la que ha culminado el Bachillerato con Matricula de Honor, hacen una media de 13,97, a sólo tres centésimas de la excelencia.
Una proeza que le ha costado esfuerzo, dedicación y constancia, estudiando “dos horas de media todos los días del año”. Lo que le ha permitido tomarse la selectividad con más calma, a modo de repaso. No obstante, confiesa que “no me lo esperaba, fue una sorpresa”. "Todos me han felicitado, desde compañeros a profesores y se lo agradezco especialmente a mis padres, que me han educado en la importancia de la cultura, de estudiar, viajar y leer”.
Lleva desde pequeño en el colegio Internacional Europa, con notas que desde la secundaria no bajan de diez. En este centro también ha cursado el Bachillerato de Humanidades. Asegura que “siempre me ha gustado estudiar”, pero explica que no todo se le daba bien. Su punto débil "es la Educación Física”.
En su horizonte más cercano, avista un doble grado. Estudiará Relaciones Internacionales y Traducción e Interterpretación en la Universidad de Comillas en Madrid. Sueña en un futuro con ser diplomático, trabajar en un organismo internacional o dedicarse a la docencia universitaria. Una expedición para la que ya se está preparando leyendo ensayos de historia y sobre relaciones internacionales.
De momento, para esta travesía tendrá que esperar, terminado el colegio, ahora podrá disfrutar del verano más largo de su vida. Lo hará desde Tomares, donde suele reunirse con sus amigos, pasear e ir al Auditorio Municipal Rafael de León.
Es uno de sus lugares preferidos por la actividad cultural que tiene, sobre todo las conferencias entre las que recuerda la que ofreció el reconocido autor español “Santiago Posteguillo, uno de mis escritores favoritos”. También le gusta la Feria de Tomares y va todos los años. Y si tiene que estudiar lo hace desde su casa, en Santa Eufemia o en la Biblioteca Municipal, donde suele acudir para realizar trabajos con los compañeros.
Pero no todos son estudios. Rompiendo estereotipos, a este joven tomareño también le gusta divertirse. “Me gusta salir con mis amigos, ir al cine, leer y me encanta viajar”. Aunque le queda mucho para circunnavegar la tierra, como hizo el navegante en 1522, nuestro Magallanes de hoy, se podría decir que ya ha visitado medio mundo para su corta edad. “He estado sobre todo en Europa”.
Y es que si le preguntan donde ejercería la carrera diplomática, responde “en el Mundo Árabe, América Latina o África Subsahariana”. “Me atrae todo lo islámico, también por la influencia en Andalucía a lo largo de la historia”, añade. De hecho ha empezado a estudiar árabe de manera autodidacta. También habla inglés y alemán, casi perfecto, tiene nivel alto de francés.
Una proeza que le ha costado esfuerzo, dedicación y constancia, estudiando “dos horas de media todos los días del año”. Lo que le ha permitido tomarse la selectividad con más calma, a modo de repaso. No obstante, confiesa que “no me lo esperaba, fue una sorpresa”. "Todos me han felicitado, desde compañeros a profesores y se lo agradezco especialmente a mis padres, que me han educado en la importancia de la cultura, de estudiar, viajar y leer”.
Lleva desde pequeño en el colegio Internacional Europa, con notas que desde la secundaria no bajan de diez. En este centro también ha cursado el Bachillerato de Humanidades. Asegura que “siempre me ha gustado estudiar”, pero explica que no todo se le daba bien. Su punto débil "es la Educación Física”.
En su horizonte más cercano, avista un doble grado. Estudiará Relaciones Internacionales y Traducción e Interterpretación en la Universidad de Comillas en Madrid. Sueña en un futuro con ser diplomático, trabajar en un organismo internacional o dedicarse a la docencia universitaria. Una expedición para la que ya se está preparando leyendo ensayos de historia y sobre relaciones internacionales.
De momento, para esta travesía tendrá que esperar, terminado el colegio, ahora podrá disfrutar del verano más largo de su vida. Lo hará desde Tomares, donde suele reunirse con sus amigos, pasear e ir al Auditorio Municipal Rafael de León.
Es uno de sus lugares preferidos por la actividad cultural que tiene, sobre todo las conferencias entre las que recuerda la que ofreció el reconocido autor español “Santiago Posteguillo, uno de mis escritores favoritos”. También le gusta la Feria de Tomares y va todos los años. Y si tiene que estudiar lo hace desde su casa, en Santa Eufemia o en la Biblioteca Municipal, donde suele acudir para realizar trabajos con los compañeros.
Pero no todos son estudios. Rompiendo estereotipos, a este joven tomareño también le gusta divertirse. “Me gusta salir con mis amigos, ir al cine, leer y me encanta viajar”. Aunque le queda mucho para circunnavegar la tierra, como hizo el navegante en 1522, nuestro Magallanes de hoy, se podría decir que ya ha visitado medio mundo para su corta edad. “He estado sobre todo en Europa”.
Y es que si le preguntan donde ejercería la carrera diplomática, responde “en el Mundo Árabe, América Latina o África Subsahariana”. “Me atrae todo lo islámico, también por la influencia en Andalucía a lo largo de la historia”, añade. De hecho ha empezado a estudiar árabe de manera autodidacta. También habla inglés y alemán, casi perfecto, tiene nivel alto de francés.
TOMARES DIGITAL / REDACCIÓN
