Un solo año han tardado los chicos entrenados por Juanmi Pérez en devolver al Tomares juvenil a donde le pertenece, a la categoría de Preferente de Sevilla.
Este partido no venía sino a culminar un gran trabajo realizado durante toda la temporada, donde los tomareños pisaron el acelerador desde primera hora y no han dado opción a la sorpresa. Tres jornadas quedan todavía en juego y los tomareños, con el ascenso ya en el bolsillo, lucharán para conseguir un campeonato que tienen a tiro de piedra, ya que aventajan a su más inmediato perseguidor en 5 puntos.
Y es que las cifras de los auriazules son estratosféricas: 22 partidos ganados, 4 empatados y solo tres derrotas, donde han marcado 115 goles y solo han recibido 30. Por si fuera poco, los pupilos de Juanmi han hecho del San Sebastián un bastión inexpugnable, donde ningún equipo ha conseguido ganar y donde solo han cedido dos empates.
Con estos números, los juveniles tomareños afrontarán el último coletazo de la liga con el objetivo cumplido y con ganas de seguir disfrutando para alzarse con el título liguero.
ADRIÁN GUAREÑO / REDACCIÓN
