El PSOE ganaría las elecciones autonómicas en Andalucía de celebrarse ahora con un 36,7 por ciento de los votos, 5,6 puntos por encima del PP, que obtendría un 31,1 por ciento de apoyos, según recoge el último Estudio General de Opinión Pública de Andalucía (Egopa), hecho publico en Granada.
Estos datos del Egopa de Invierno, que lleva a cabo el Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía (Cadpea), señalan un "estancamiento" en la estimación de voto de ambos partidos respecto a la serie anterior, con un leve incremento de seis décimas en el caso del PSOE y de 2,1 puntos en el del PP. Por debajo, se situarían otras fuerzas políticas como IU con el 15,5 por ciento de respaldos y que baja 3,2 puntos porcentuales, UPyD con el 7,4 por ciento de votos (0,6 más) y PA/PSA con un 3 por ciento, una décima más que en el análisis anterior de hace seis meses.
En caso de celebrarse ahora comicios autonómicos, la abstención sería del 44,3 por ciento, frente a un 55,7 de participación, según el estudio, que señala a la presidenta andaluza, Susana Díaz, como la única líder política de la comunidad que obtiene un aprobado de 5 puntos sobre una escala de 10. Por debajo de ella, se sitúan en valoración media el coordinador regional de IU, Antonio Maíllo (4,1) -que obtiene la misma calificación que el vicepresidente andaluz, Diego Valderas-, el secretario general del PA, Antonio Jesús Ruiz (3,9), Esteban de Manuel, de EQUO, (3,6), el todavía presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido (3,6) y el líder de UPyD en Andalucía, Martín de la Herrán (3,4).
En cuanto al grado de conocimiento de estos líderes políticos, Díaz aumenta considerablemente respecto a su etapa como consejera y alcanza un 83 por ciento, Valderas es conocido por un 67,3 por ciento de los encuestados, seguido de Zoido (61,6%), Maíllo (25,1%), Ruiz (7,4%), De la Herrán (4,7%) y De Manuel (2,6%).
La gestión del Gobierno de Andalucía es valorada por el 34,7 por ciento de los encuestados como "bastante mala o muy mala", aunque esa percepción negativa cae en 23,5 puntos, mientras que la coalición entre PSOE e IU también es valorada negativamente de forma mayoritaria, por un 48,6 por ciento. En cuanto a la labor de la oposición del PP, el 69 por ciento la considera "bastante mala o muy mala", aunque esa percepción negativa también baja en 7,3 puntos respecto al estudio anterior.
El estudio, presentado por Carmen Ortega, directora del Cadpea, y Ángel Cazorla, director del trabajo de campo, se efectuó sobre una muestra de 3.200 entrevistas telefónicas en toda Andalucía entre el 8 de enero y el 7 de febrero de 2014, días antes de que Juan Manuel Moreno Bonilla presentara su candidatura a la presidencia del PP andaluz.
Entre los datos expuestos, los investigadores han destacado que la estimación de la participación sería del 55,7 por ciento, la más baja registrada en unas elecciones andaluzas, cuyo umbral mínimo lo marcan los comicios de 1990, cuando llegó al 56 por ciento. "Estamos viendo en los últimos estudios que está creciendo de forma alarmante la apatía política y electoral de la población", ha dicho Ortega, quien se ha referido también al "desgaste" del bipartidismo y del PP, como partido en el Gobierno, en lo que sería una especie de "voto de castigo" respecto al Ejecutivo nacional.
Estos datos del Egopa de Invierno, que lleva a cabo el Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía (Cadpea), señalan un "estancamiento" en la estimación de voto de ambos partidos respecto a la serie anterior, con un leve incremento de seis décimas en el caso del PSOE y de 2,1 puntos en el del PP. Por debajo, se situarían otras fuerzas políticas como IU con el 15,5 por ciento de respaldos y que baja 3,2 puntos porcentuales, UPyD con el 7,4 por ciento de votos (0,6 más) y PA/PSA con un 3 por ciento, una décima más que en el análisis anterior de hace seis meses.
En caso de celebrarse ahora comicios autonómicos, la abstención sería del 44,3 por ciento, frente a un 55,7 de participación, según el estudio, que señala a la presidenta andaluza, Susana Díaz, como la única líder política de la comunidad que obtiene un aprobado de 5 puntos sobre una escala de 10. Por debajo de ella, se sitúan en valoración media el coordinador regional de IU, Antonio Maíllo (4,1) -que obtiene la misma calificación que el vicepresidente andaluz, Diego Valderas-, el secretario general del PA, Antonio Jesús Ruiz (3,9), Esteban de Manuel, de EQUO, (3,6), el todavía presidente del PP andaluz, Juan Ignacio Zoido (3,6) y el líder de UPyD en Andalucía, Martín de la Herrán (3,4).
En cuanto al grado de conocimiento de estos líderes políticos, Díaz aumenta considerablemente respecto a su etapa como consejera y alcanza un 83 por ciento, Valderas es conocido por un 67,3 por ciento de los encuestados, seguido de Zoido (61,6%), Maíllo (25,1%), Ruiz (7,4%), De la Herrán (4,7%) y De Manuel (2,6%).
La gestión del Gobierno de Andalucía es valorada por el 34,7 por ciento de los encuestados como "bastante mala o muy mala", aunque esa percepción negativa cae en 23,5 puntos, mientras que la coalición entre PSOE e IU también es valorada negativamente de forma mayoritaria, por un 48,6 por ciento. En cuanto a la labor de la oposición del PP, el 69 por ciento la considera "bastante mala o muy mala", aunque esa percepción negativa también baja en 7,3 puntos respecto al estudio anterior.
El estudio, presentado por Carmen Ortega, directora del Cadpea, y Ángel Cazorla, director del trabajo de campo, se efectuó sobre una muestra de 3.200 entrevistas telefónicas en toda Andalucía entre el 8 de enero y el 7 de febrero de 2014, días antes de que Juan Manuel Moreno Bonilla presentara su candidatura a la presidencia del PP andaluz.
Entre los datos expuestos, los investigadores han destacado que la estimación de la participación sería del 55,7 por ciento, la más baja registrada en unas elecciones andaluzas, cuyo umbral mínimo lo marcan los comicios de 1990, cuando llegó al 56 por ciento. "Estamos viendo en los últimos estudios que está creciendo de forma alarmante la apatía política y electoral de la población", ha dicho Ortega, quien se ha referido también al "desgaste" del bipartidismo y del PP, como partido en el Gobierno, en lo que sería una especie de "voto de castigo" respecto al Ejecutivo nacional.
MARÍA JOSÉ UFARTE / REDACCIÓN
