Nacen menos niños, la población envejece y, pese a todo, Sevilla se mantiene, al fin y al cabo, en esa cúspide de la (casi) eterna juventud si se compara con el resto de provincias españolas. Su techo lo tocó en 2008, con 25.193 alumbramientos, 2.333 más que los registrado en 2012.
El presente año sigue pisando el freno de la natalidad. El avance del Instituto Nacional de Estadística (INE) contabiliza 10.119 nuevos sevillanos en el primer semestre de 2013, 260 menos que en el mismo periodo del año anterior. Pero esa ralentización progresiva no cala, de momento, en una provincia que aún sigue a la cabeza en parámetros de juventud en 2012: se situó en la cuarta con mayor tasa de natalidad –nacimientos por cada mil habitantes– sólo superada por Almería, Murcia y Guadalajara, además de ascender un puesto –superando a Las Palmas– y erigirse como la cuarta provincia con edad media más baja del país (39,14 años).
Eso, sin embargo, no oculta el envejecimiento lento –más tarde que otras provincias– que está padeciendo Sevilla. La edad media ha aumentado en cinco años en dos décadas. Pero eso, de momento, no afecta porque el grueso de la población se sitúa en edad de procrear. No en vano, es la quinta provincia con menor cuota de población mayor de 64 años (14,5%).
Todos estos ingredientes hacen que Sevilla se mantenga todavía con un saldo vegetativo positivo. Incluso en el primer semestre de 2013. Los datos provisionales que ha aportado el INE marca esa tendencia: la provincia sigue cayendo en nacimientos (10.119), aunque la caída es más acusada en los fallecidos (7.770 muertes, 1.063 menos que el mismo periodo de 2012). Eso permite un saldo vegetativo positivo en la provincia de 2.349 personas, mayor incluso que el vivido el semestre del anterior ejercicio, que fue de 2.046.
De enero a junio de este año vinieron al mundo 3.307 bebés en la capital –el 3% menos que las cifras provisionales de 2012–. Nada que ver con los 4.099 nacimientos del primer semestre de 2008. No obstante, el crecimiento vegetativo se ha visto beneficiado por un descenso de los fallecimientos.

El presente año sigue pisando el freno de la natalidad. El avance del Instituto Nacional de Estadística (INE) contabiliza 10.119 nuevos sevillanos en el primer semestre de 2013, 260 menos que en el mismo periodo del año anterior. Pero esa ralentización progresiva no cala, de momento, en una provincia que aún sigue a la cabeza en parámetros de juventud en 2012: se situó en la cuarta con mayor tasa de natalidad –nacimientos por cada mil habitantes– sólo superada por Almería, Murcia y Guadalajara, además de ascender un puesto –superando a Las Palmas– y erigirse como la cuarta provincia con edad media más baja del país (39,14 años).
Eso, sin embargo, no oculta el envejecimiento lento –más tarde que otras provincias– que está padeciendo Sevilla. La edad media ha aumentado en cinco años en dos décadas. Pero eso, de momento, no afecta porque el grueso de la población se sitúa en edad de procrear. No en vano, es la quinta provincia con menor cuota de población mayor de 64 años (14,5%).
Todos estos ingredientes hacen que Sevilla se mantenga todavía con un saldo vegetativo positivo. Incluso en el primer semestre de 2013. Los datos provisionales que ha aportado el INE marca esa tendencia: la provincia sigue cayendo en nacimientos (10.119), aunque la caída es más acusada en los fallecidos (7.770 muertes, 1.063 menos que el mismo periodo de 2012). Eso permite un saldo vegetativo positivo en la provincia de 2.349 personas, mayor incluso que el vivido el semestre del anterior ejercicio, que fue de 2.046.
De enero a junio de este año vinieron al mundo 3.307 bebés en la capital –el 3% menos que las cifras provisionales de 2012–. Nada que ver con los 4.099 nacimientos del primer semestre de 2008. No obstante, el crecimiento vegetativo se ha visto beneficiado por un descenso de los fallecimientos.
TOMARES DIGITAL / REDACCIÓN