El Consorcio Metropolitano de Transportes del Área de Sevilla, participado por la Junta de Andalucía, la Diputación y 45 municipios, han aprobado en el seno de su consejo de administración los presupuestos de 2014, que ascienden a 31.059.909 euros. El nuevo presupuesto crece un 9,12% respecto al anterior, aunque para tal extremo los ayuntamientos consorciados afrontan una "cuota extraordinaria" que superaría en más del 40% sus aportaciones habituales.
Los problemas económicos del Consorcio de Transportes no constituyen ninguna novedad, pues en julio de 2012 su consejo de administración aprobó un plan económico y financiero destinado a equilibrar las castigadas cuentas de la entidad, cuya deuda ascendía entonces a unos nueve millones de euros. Después, y hasta abril de 2013, la entidad emprendió reducciones de horarios en 21 de sus 56 rutas siempre al objeto de ahorrar costes.
El pasado 1 de enero entraron en vigor las nuevas tarifas del Consorcio de Transportes con una subida del 2,17%, según la variación interanual del IPC de septiembre de 2013. Se trata de la tercera subida que experimentan estas tarifas en sólo un año, pues la entidad actualizó al alza sus tarifas al comenzar 2013 y en julio de ese mismo año acometió otro incremento extraordinario.
Todas estas medidas derivan de un intento por reconducir las cuentas de la entidad, marcadas por el impago de cuotas en el que incurrían determinados ayuntamientos, la caída del número de viajeros y el precio de los carburantes.
Con el voto en contra de los representantes institucionales del PP, la abstención de los miembros del PSOE, y el voto favorable de los representantes institucionales pertenecientes a IU-CA y de la Consejería de Fomento y Vivienda, el consejo de administración aprobó los presupuestos. De no contar con estas aportaciones extraordinarias, la institución correría el riesgo de no contar con partidas a partir del 1 de agosto para pagar a las operadoras que prestan los servicios de transporte de viajeros.
Los problemas económicos del Consorcio de Transportes no constituyen ninguna novedad, pues en julio de 2012 su consejo de administración aprobó un plan económico y financiero destinado a equilibrar las castigadas cuentas de la entidad, cuya deuda ascendía entonces a unos nueve millones de euros. Después, y hasta abril de 2013, la entidad emprendió reducciones de horarios en 21 de sus 56 rutas siempre al objeto de ahorrar costes.
El pasado 1 de enero entraron en vigor las nuevas tarifas del Consorcio de Transportes con una subida del 2,17%, según la variación interanual del IPC de septiembre de 2013. Se trata de la tercera subida que experimentan estas tarifas en sólo un año, pues la entidad actualizó al alza sus tarifas al comenzar 2013 y en julio de ese mismo año acometió otro incremento extraordinario.
Todas estas medidas derivan de un intento por reconducir las cuentas de la entidad, marcadas por el impago de cuotas en el que incurrían determinados ayuntamientos, la caída del número de viajeros y el precio de los carburantes.
Con el voto en contra de los representantes institucionales del PP, la abstención de los miembros del PSOE, y el voto favorable de los representantes institucionales pertenecientes a IU-CA y de la Consejería de Fomento y Vivienda, el consejo de administración aprobó los presupuestos. De no contar con estas aportaciones extraordinarias, la institución correría el riesgo de no contar con partidas a partir del 1 de agosto para pagar a las operadoras que prestan los servicios de transporte de viajeros.
TOMARES DIGITAL / REDACCIÓN
